Negociaciones en Egipto para lograr una nueva tregua en Gaza tras seis meses de guerra
Delegaciones de Estados Unidos e Israel tienen previsto reunirse este fin de semana en Egipto para intentar pactar un alto el fuego en la Franja de Gaza, asolada por una guerra que el domingo cumple seis meses.
El conflicto estalló por el letal ataque de comandos del movimiento islamista palestino Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, en el que mataron a 1.170 personas, en su mayoría civiles, según un cómputo de la AFP basado en datos oficiales israelíes.
También capturaron a más de 250 personas, de las cuales 130 siguen retenidas en Gaza, incluidas 34 que habrían fallecido, según las autoridades israelíes.
La ofensiva aérea y terrestre lanzada por Israel en represalia ya dejó al menos 33.137 muertos, sobre todo civiles, según el Ministerio de Salud del gobierno de Hamás en Gaza, y tiene a los 2,4 millones de habitantes del territorio al borde de la hambruna, según la ONU.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que se haga "todo lo posible para garantizar la liberación de los rehenes".
Solicitó también a Catar y Egipto, que median en este conflicto junto con Estados Unidos, que consigan que el grupo islamista Hamás se comprometa a aceptar un acuerdo con Israel, señaló a la AFP un funcionario estadounidense.
Según medios de comunicación norteamericanos, se reunirán en El Cairo el director de la CIA, Bill Burns; el jefe del Mosad israelí, David Barnea; y funcionarios cataríes y egipcios.
Estados Unidos, Egipto y Catar, que actúan como mediadores, llevan semanas manteniendo charlas entre bastidores en un intento de garantizar una tregua temporal y la liberación de los rehenes en manos de Hamás a cambio de prisioneros palestinos en cárceles israelíes, hasta ahora en vano.
- "Manos cubiertas de sangre" -
Hamás exige el fin de la ofensiva israelí, la retirada de las tropas israelíes, el regreso de los desplazados a sus hogares, el aumento de la ayuda humanitaria y el canje de rehenes contra prisioneros.
El gobierno israelí dice estar decidido a continuar la guerra hasta "eliminar a Hamás", considerada organización terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel.
El sábado, el ejército israelí anunció que recuperó por la noche en Jan Yunis, en el sur de Gaza, el cadáver del rehén Elad Katzir, que tenía 47 años en el momento de su secuestro en el kibutz de Nir Oz.
Según la misma fuente, fue asesinado en cautiverio por la organización terrorista Yihad Islámica, que participó en el ataque del 7 de octubre.
Su madre, Hanna Katzir, también fue secuestrada pero fue liberada el 24 de noviembre durante una tregua de una semana. Su padre, Avraham, murió durante el ataque en el kibutz.
Tras el anuncio, su hermana arremetió contra los dirigentes israelíes. Liberarlo con vida "habría sido posible si se hubiera llegado a tiempo a un acuerdo sobre los rehenes", estimó Carmit Palty Katzir en su cuenta Facebook.
"Primer ministro, gabinete de guerra, miembros de la coalición [de gobierno]. Mírense en el espejo y digan que sus manos no están cubiertas de esta sangre", añadió.
- "Insuficientes" -
Israel está sometido a una fuerte presión internacional para que deje entrar más ayuda en Gaza, especialmente tras la muerte el lunes de siete cooperantes de la oenegé World Center Kitchen (seis extranjeros y un palestino) en un ataque israelí con dron.
El ejército israelí admitió haber cometido "graves errores" en este ataque, alegando que sus soldados habían creído erróneamente que estaban atacando a "agentes de Hamás".
La ayuda, procedente principalmente de Egipto, esta estrictamente controlada por Israel y entra a cuentagotas por el paso fronterizo de Kerem Shalom, entre el territorio israelí y el sur de Gaza.
El viernes, Israel anunció planes para abrir "temporalmente" otros pasos fronterizos para entregar más ayuda, así como un "aumento de la ayuda a través de Kerem Shalom".
Estados Unidos dijo que esperaba "resultados" rápidos sobre el terreno, mientras que el jefe de la ONU, Antonio Guterres, calificó las medidas de "insuficientes".
J.Romagnoli--IM