Las compañías aéreas prevén beneficios pese a la desaceleración económica
Pese a la desaceleración económica mundial, las compañías aéreas se declararon este martes más optimistas para sus finanzas en 2022, y esperan regresar al terreno positivo el próximo año, por primera vez desde que empezó la pandemia.
Impulsadas sobre todo por la actividad en Estados Unidos, se espera que las aerolíneas registren un beneficio acumulado de 4.700 millones de dólares en 2023, afirmó el martes la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), que en junio ya había anticipado que la media de resultados del año que viene no arrojará pérdidas.
Un primer beneficio en cuatro años supondrá "un gran éxito, dada la magnitud de los daños económicos provocados por las restricciones decididas por los gobiernos durante la pandemia", comentó el director general de la IATA, Willie Walsh.
La rentabilidad seguirá siendo baja, en vista de la facturación global de las compañías, que el año que viene será previsiblemente de 779.000 millones de dólares.
Pero las pérdidas del ejercicio actual también serán más limitadas de lo esperado: 6.900 millones de dólares, contra los 9.700 millones de dólares que se barajaban. Una mejora espectacular si se compara con los 42.000 millones perdidos en 2021 y los 137.700 millones de 2020, cuando estalló la pandemia de covid-19.
La IATA achacó las cifras a una mejor rentabilidad por pasajero -a causa de una fuerte subida del precio de los billetes- y a "un control de los costes frente al aumento de los precios del petróleo", causado por la reactivación económica poscovid y la invasión rusa de Ucrania.
Sin embargo, no todas las regiones del mundo volverán al terreno positivo el próximo año, subrayó la IATA ante la prensa este martes en Ginebra, donde tiene su sede.
- ¿Qué pasará con China? -
Las compañías radicadas en América del Norte cerrarán el año con un beneficio total de 11.400 millones de dólares, mientras que las de Europa y Oriente Medio tendrán unos beneficios acumulados respectivos de 600 y 300 millones de euros (630 y 315 millones de dólares).
En cambio, las compañías de América Latina también seguirán en déficit en 2023 (800 millones de dólares en pérdidas acumuladas), así como la de África (pérdidas de 200 millones), según la IATA.
Las aerolíneas de Asia-Pacífico también permanecerán en terreno negativo, pues se calcula que tendrán 6.600 millones de dólares en pérdidas, sobre todo a causa de las restricciones a los desplazamientos decretadas por la pandemia de covid-19 en China, principal mercado aéreo de la zona.
La política de "cero covid" en vigor en China también afectó a la estimación del tráfico de pasajeros de la IATA para 2022, al 70,6% del nivel de 2019, frente al 82,4% que se barajaba hasta ahora.
A esto se suma una revisión a la baja del crecimiento mundial desde la publicación de las anteriores proyecciones de la organización el pasado junio, en un contexto de inflación.
La IATA también revisó a la baja la proyección de su volumen de negocio para 2022, a 727.000 millones de dólares, frente a los 782.000 millones que se esperaban hace seis meses.
En 2023, las aerolíneas esperan operar un 85,5% del nivel del tráfico de antes de la pandemia, medido en pasajeros por kilómetro transportados (RPK), uno de los índices de referencia del sector.
El número de pasajeros aéreos superará en 2023 el umbral de los 4.000 millones y rondará los 4.200 millones de viajeros, auguró la IATA, en comparación con el récord histórico de 2019 (4.500 millones).
Pero, pese a declararse "optimista" de cara a 2023, Walsh matizó que "con márgenes tan escasos, un movimiento insignificante de estas variables puede hacernos volver al terreno negativo".
La IATA precisó que sus previsiones se basaban en una eventual supresión de las restricciones en China en el segundo semestre de 2023, y que si las autoridades de Pekín deciden prolongar su política de "cero covid", la organización revisará sus proyecciones a la baja.
P.Rossi--IM