Europa busca mostrar unidad ante el retorno de Trump a la Casa Blanca
Dirigentes de decenas de países europeos conversaron este jueves en Budapest sobre las consecuencias del retorno de Donald Trump a la Casa Blanca, y buscaron presentar un frente unido ante los desafíos en materia de seguridad y defensa.
La agenda formal del encuentro, que reunió a los 27 miembros de la UE y a una veintena de invitados, estaba centrada en asuntos como la migración y la seguridad económica, pero la elección de Trump dominó las conversaciones.
Los participantes de esta V cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE) expresaron su preocupación ante la perspectiva de posibles tensiones comerciales, pero también por una eventual reducción de la ayuda estadounidense a Ucrania, un asunto de extrema sensibilidad en Europa.
El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, dijo que los temas abordados fueron "muy complicados, difíciles y peligrosos".
"No tenemos tiempo que perder", afirmó.
"La historia se acelera con las elecciones en Estados Unidos, y un capítulo se cierra. El mundo va a cambiar, y va a cambiar más rápidamente que antes, más rápido de lo que pensamos", dijo Orban.
"También estuvimos de acuerdo en que Europa debe asumir una mayor responsabilidad en asegurar nuestra propia paz y seguridad. Para decirlo son rodeos: no podemos esperar que los estadounidenses nos protejan", agregó.
Respecto a las posibilidades de un final negociado a la guerra en Ucrania, los países que participaron de la reunión coincidieron en que el Viejo Continente debe tener un papel protagónico.
"Europa debe seguir siendo un actor activo en negociaciones en el futuro. Ello determinará el futuro de Europa", comentó Orban, quien apuntó que "pronto habrá tales negociaciones".
Durante la campaña electoral, Trump prometió poner punto final a la guerra entre Ucrania y Rusia en 24 horas.
Este mismo jueves, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó que la idea de hacer concesiones a Rusia para poner fin a la guerra era "inaceptable".
Para el primer ministro de Finlandia, Petteri Orpo, Europa debe enviar un "mensaje claro a Estados Unidos y al nuevo gobierno de que nosotros apoyaremos a Ucrania todo lo que sea necesario".
"Debe ser un mensaje claro y fuerte", insistió.
- Vodka, no champán -
Orban había prometido abrir "varias botellas de champán" para celebrar la victoria de Trump, pero este jueves admitió que en realidad la conmemoró con vodka.
"Estaba en Kirguistán cuando Donald Trump ganó las elecciones, y allí tienen diferentes tradiciones, de forma que avanzamos alegremente sobre la vodka", contó.
En la cumbre, el presidente francés, Emmanuel Macron, insistió en que la coyuntura política favorece que Europa inicie los pasos para reafirmar su autonomía.
El momento, dijo, impone "actuar, defender nuestros intereses nacionales y europeos, creer en nuestra soberanía, en una autonomía estratégica".
Los europeos, señaló Macron, "no debemos delegar eternamente nuestra seguridad a los estadounidenses".
En la misma línea, el primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis, comentó que "llegó el momento de que nos despertemos de nuestra inocencia geopolítica".
"Debemos ser realistas. No podemos mantener una asociación transatlántica en una posición de fragilidad", apuntó.
La reunión, sin embargo, situó al controvertido primer ministro húngaro como una figura política central en el continente.
De un lado, mantiene una relación fluida con Trump, hasta el punto de que la presidencia semestral húngara en el Consejo Europeo tiene como lema "Hacer grande a Europa nuevamente", un lema que recuerda al "Make America Great Again" del norteamericano.
De otro, Orban no oculta sus buenas relaciones con el presidente ruso, Vladimir Putin, con quien se reunió en Moscú en junio, algo que enfadó a numerosos dirigentes europeos.
En la cumbre también se trató la situación política en Alemania, un peso pesado europeo y locomotora económica de la UE, cuya alianza gubernamental se rompió.
La crisis política es de tal magnitud que el jefe del gobierno, Olaf Scholz, no participó de la reunión y tenía previsto desembarcar en Budapest al inicio de la noche.
En tanto, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, recordó que "en las democracias tenemos elecciones y construcción de gobiernos".
El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, no participó en la CPE, debido a la catástrofe por las inundaciones en Valencia.
H.Gallo--IM