El costo de vida determina el voto en el decisivo estado de Nevada
Inflación, el costo de la gasolina, los alimentos y el aumento del alquiler eran los asuntos más comentados por muchos de los electores que acudieron a las urnas esta martes en Las Vegas, donde la economía impacta los bolsillos, y por ende los votos.
Donald Trump y Kamala Harris compiten por la Casa Blanca en unas muy reñidas elecciones presidenciales este 5 de noviembre, y en Nevada, uno de los siete estados decisivos del país, la economía es el factor decisivo para el 37% de los electores, de acuerdo con una encuesta del Emerson College.
"Aquí, desde el covid el costo de vida está fuera de control", dijo Lee Lovett, quien trabaja en una tienda de equipos de video, y quien fue a las urnas con los precios de la vivienda en mente.
"Varias personas tienen que vivir en una misma casa, familias enteras, porque no pueden pagar su propia casa (...) Eso es importante", agregó Lovett, quien mantuvo su elección en secreto.
La ciudad del pecado, en Nevada, volvió con fuerza en los últimos años luego de una paralización absoluta durante la pandemia.
Pero a pesar de sus masivos espectáculos, prestigiosas competencias deportivas y centelleantes casinos, sus residentes reclaman por el incremento del costo de vida y, si en algo coinciden, es en que las cosas no son como eran.
Michael Pidding, un veterano retirado que se mudó a Las Vegas hace siete años por la posibilidad de comprar una amplia casa gracias a los bajos costos inmobiliarios de la época, dice apoyar a Trump porque durante su gestión "todo era barato".
"Los precios de la gasolina eran bajos, la comida ... todo. La economía estaba creciendo", dijo el hombre de 79 años.
En cambio, para Amy Rivera, una estudiante de 18 años quien vive con sus padres por motivos económicos, la opción lógica en esta -su primera vez en las urnas- era Harris.
"Ella promete incentivos para las personas que van a comprar una casa por primera vez, algo que mi hermano y yo queremos hacer algún día, así como ayudar a los estudiantes con sus pagos universitarios", dijo la joven latina quien fue a votar al estadio Allegiant envuelta en una bandera estadounidense.
- "Promesas" -
Las Vegas se volvió uno de los escenarios claves de esta reñida batalla electoral toda vez que Nevada es uno de los siete estados bisagras que serán decisivos en estas elecciones.
Una cuarta parte de los votantes de Nevada fueron a las urnas durante las primeras dos semanas del proceso, periodo establecido por la ley estadounidense para el voto anticipado.
De acuerdo con números oficiales, 45,5% de estos votantes pertenecen al partido Republicano, y 27,7% al Demócrata.
Los demócratas han vencido en el estado en las últimas cuatro elecciones, aunque en las dos últimas ocasiones con márgenes muy estrechos.
Trump perdió allí en 2016 por 2,42% de los votos, pero eso no le impidió hacerse con la Presidencia en ese entonces. Cuatro años más tarde, cuando Biden derrotó al republicano, el partido Demócrata mantuvo su poderío en Nevada donde venció por apenas 33.500 votos.
Las encuestadoras pronostican un final muy reñido en el estado, donde se registra un empate técnico luego de meses de una intensa campaña electoral que incluyó frecuentes visitas de Harris y Trump.
En un intento por conquistar Las Vegas, tradicionalmente demócrata, Trump lanzó al inicio de su campaña la promesa de hacer que las propinas tengan exención fiscal.
Tratándose de la principal fuente de ingreso de los trabajadores del sector del ocio y la hotelería, que componen una cuarta parte de la fuerza laboral de la ciudad, la propuesta rápidamente ganó apoyo al punto de ser adoptada también por Harris.
Sin embargo no todos se sintieron motivados por esta expectativa.
Gina Sanders, quien trabaja en un casino y votó este martes por Harris, se mostró cautelosa sobre el real impacto que la propuesta podría tener en el bolsillo de los trabajadores.
"Lo más importante es que cada candidato cumpla sus promesas", comentó.
A.Bruno--IM