La tradición indígena de la "sierra sagrada" de Colombia reconocida por la Unesco
El conocimiento ancestral de los indígenas colombianos que habitan el sistema montañoso costero más alto del mundo pasó a formar parte del patrimonio inmaterial de la humanidad, anunció el martes la Unesco.
El patrimonio cultural inmaterial, o "patrimonio vivo", es una herencia "de nuestros antepasados y transmitida a nuestros descendientes", señala la Unesco. Esta comprende tradiciones orales, rituales, prácticas sociales, etc.
En ese sentido, la inclusión de las tradiciones de los pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta "es muy importante porque (...) nos da la posibilidad de que la humanidad reconozca otras formas de vida y otras formas de pensar", expresó Leonor Zalabata, del pueblo Arhuaco y embajadora de Colombia ante la ONU, quien asistió a la ceremonia.
En un vasto territorio que va desde el nivel del mar hasta los 5.770 metros en el norte de Colombia, los pueblos originarios Kogui, Arhuaco, Wiwa y Kankuamo atesoran "conocimientos que nos conducen a la paz, a la conservación de la tierra y del universo", agregó Zalabata, la primera indígena en representar a Colombia ante Naciones Unidas.
Reunido en Marruecos desde el lunes, el Comité de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco examinará hasta el 4 de diciembre 56 candidaturas a engrosar su lista, que ya incluye el "pasillo" ecuatoriano, el tango, los mariachis mexicanos o la parranda de San Juan de Venezuela.
Bajo jurisdicción indígena, en los resguardos de la Sierra viven unos 26.500 habitantes en chozas de paja. Abarcan unas 380.000 hectáreas delimitadas por lo que llaman la "linea negra", que separa sus territorios de los de los colonos.
"Nuestro pensamiento es universal porque abarca cuanto existe, es decir, lo visible y lo invisible, los grandes misterios que encierra la naturaleza y que, hasta ahora, el hombre no sabe, pues todo lo lleva a la química y a las ciencias", explica el indígena Norberto Torres en el libro 'Orden del Todo' que recoge las investigaciones del antropólogo Reinaldo Barbosa sobre estos pueblos.
"Todas las cosas tienen su espíritu, inclusive las plantas, las piedras, todo esto conforma un pensamiento que va al universo, unido todo como un respiro", explica Torres, también conocido como Mamo Zeukukuy.
El título de "Mamo" lo distingue como una de las autoridades que transmiten el pensamiento ancestral de generación en generación en esta majestuosa cadena montañosa en forma de pirámide, ubicada a 42 kilómetros del mar Caribe y declarada reserva de la biósfera por la Unesco en 1979.
-Bajo amenaza-
Llamada en lengua indígena Goanawindwa-Shwndwa, la Sierra Nevada está registrada en los Guinness World Records como el sistema montañoso costero más alto del mundo.
"Esta tradición la hemos seguido en forma práctica y oral desde hace 3.600 años aproximadamente, desde cuando tuvimos asiento en esta Sierra Sagrada considerada como corazón del mundo", agrega el Mamo Arwa Vikw.
Koguis, arhuacos, wiwas y kankuamos recorren sus escarpadas laderas con sus tradicionales vestidos blancos y mochilas terciadas sobre los hombros.
En los setenta los pueblos protegieron sus territorios frente boom de la marihuana y más recientemente al de los narcocultivos de los que se extrae la cocaína.
En 2002, 12 wiwas murieron en dos masacres perpetradas por grupos paramilitares que controlaban las rutas del narcotráfico en la zona. El Estado pidió perdón por estos hechos en 2018.
Hoy la fuerza pública ha expulsado a la mayoría de actores armados de la Sierra y las plantaciones de hoja de coca se limitan al uso ceremonial que los indígenas le dan esta planta que consideran sagrada y que mastican para hablar con los mamos.
Sin embargo, la expansión del turismo y los puertos industriales en los alrededores de la Sierra constituyen una nueva amenaza contra su identidad, según el antropólogo Barbosa.
La "sabiduría ancestral" de los originarios "juega un papel fundamental para garantizar la protección del ecosistema (...) y evitar la pérdida de su identidad cultural", valora el ministerio de Cultura de Colombia.
Las 90 comunidades originarias de Colombia representan el 4,4% de sus 50 millones de habitantes.
E.Mancini--IM