Presidente de China hace su primera visita a Xinjiang desde la represión
El presidente de China, Xi Jinping, realizó una visita pública a Xinjiang (noroeste), informó este viernes la prensa estatal, la primera desde que comenzó la represión en esta región en la que su gobierno está acusado de haber detenido en campos a más de un millón de uigures y otras minorías musulmanas.
La agencia estatal de noticias Xinhua dijo que Xi elogió los avances realizados durante una visita de inspección a esa región, la primera desde 2014, cuando tres personas murieron en un ataque que presagiaba el inicio de una campaña de detención masiva tres años después.
Estados Unidos califica las acciones de China en Xinjiang de "genocidio" y "crímenes contra la humanidad", acusaciones que Pekín niega con vehemencia, pues afirma que sus medidas de seguridad son una respuesta necesaria al extremismo.
Xi también elogió el trabajo del Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang (XPCC), una organización paramilitar sancionada por Washington por supuestas violaciones de los derechos humanos.
El grupo hizo "grandes progresos" en reforma y desarrollo, dijo Xi durante un viaje el miércoles a la ciudad de Shihezi en el norte de la región, según el reporte de Xinhua.
Los medios estatales publicaron imágenes que mostraban a Xi hablando con estudiantes y funcionarios locales, participando en un espectáculo de canto y danza, y recibiendo el aplauso entusiasta de los residentes vestidos con ropa tradicional.
Durante su visita a China en mayo, la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, instó a las autoridades a evitar medidas "arbitrarias e indiscriminadas" en Xinjiang. Pero señaló que su visita no era "una investigación".
Esa gira fue duramente criticada por grupos de derechos humanos y de uigures en el extranjero.
Pekín está acusado de retener a uigures y otras personas de minorías musulmanas en centros de detención en Xinjiang, de esterilizar a las mujeres y obligar a estos ciudadanos a realizar trabajos forzados.
China niega todas las acusaciones y afirma que los campos de trabajo son centros de formación profesional destinados a luchar contra el islamismo extremista.
E.Mancini--IM