Las protestas de trabajadores de las cárceles catalanas obligan a confinar a los presos en sus celdas
Alrededor de 4.000 reclusos de las cárceles de Cataluña se encontraban confinados este lunes en sus celdas debido a las protestas de los trabajadores de las prisiones de esta región española, movilizados tras la muerte de una cocinera a manos de un interno que se suicidó después.
Tras una breve distensión el domingo, los trabajadores reactivaron el lunes sus manifestaciones y bloqueos frente a varias cárceles catalanas, donde en algunos casos volvieron a levantarse barricadas y quemar neumáticos, según imágenes de televisión.
Las protestas, iniciadas la semana pasada, dificultan los accesos a varios centros, impidiendo su normal funcionamiento, y, en alrededor de media docena de prisiones, obligaron incluso a confinar a los reclusos en sus celdas.
"En estos momentos tenemos 4.000 personas que no pueden salir de sus celdas", reconoció la responsable regional de Justicia, Gemma Ubasart, este lunes en una rueda de prensa en Barcelona.
"Seguimos en (...) una situación grave, una situación que pone en riesgo los derechos y la seguridad de los internos y de las personas trabajadoras que cumplen sus obligaciones", agregó Ubasart, indicando que es "necesario y urgente" reconducir la situación.
Los servicios esenciales de alimentación y salud están garantizados, indicaron fuentes del Departamento catalán de Justicia.
El movimiento se inició la semana pasada, después de que un recluso atacara el miércoles, "por causas que se desconocen", a una trabajadora de la cocina antes de suicidarse en la prisión de Mas d'Enric, en la provincia de Tarragona, según informó entonces la policía catalana.
El preso había sido condenado "por asesinato con arma blanca cometido en 2016" y cumplía una condena a 11 años de cárcel, indicó el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
El suceso conmocionó a los trabajadores del sector, que desde la madrugada del viernes comenzaron a concentrarse a las puertas de varias prisiones catalanas para denunciar la creciente inseguridad que afirman padecer.
"Esta movilización no es por condiciones laborales (...) es para garantizar nuestra vida, que está absolutamente en entredicho actualmente", indicó el lunes Xavier Martínez, portavoz del sindicato UGT Prisiones en Cataluña.
Pese a que la consejera de Justicia reiteró este lunes su llamamiento al diálogo, los sindicatos volvieron a no presentarse en la cita convocada en la mañana por el gobierno regional, que reunió en la tarde un gabinete de crisis para seguir la situación.
A.Goretti--IM