La policía española detiene a 53 personas ligadas a una red que amañaba apuestas
La policía española anunció este viernes la detención de 53 personas que trabajaban para una organización internacional que amañaba eventos deportivos y defraudaba a casas de apuestas, usando tecnología de punta para recibir antes la señal de los partidos.
A cambio de dinero, los arrestados prestaban su identidad o sus cuentas bancarias para que la red pudiera envidar en diferentes plataformas en línea o casas de apuestas sin llamar la atención, informó la Policía Nacional en rueda de prensa en Madrid.
Estas personas, llamadas "mulas", eran "jóvenes, de entre 18 y 25 años de edad, principalmente varones, sin ingresos o con ingresos mínimos y con vínculos de amistad con parte de la organización criminal", explicó David Calvete, a cargo del control de juegos de azar en el cuerpo de seguridad.
Fueron capturados a finales de diciembre, principalmente en Madrid y Toledo, una localidad al sur de la capital, pero también en otras regiones de España, detalló Calvete.
Los sospechosos habían trabajado para una organización que la policía había desarticulado meses antes, según indicaron las autoridades en septiembre pasado, cuando anunciaron la detención de otras 22 personas, entre ellos los dos cabecillas, de esta red internacional de origen rumano y búlgaro asentada en España.
La banda se dedicaba a amañar partidos, principalmente en Rumanía y Bulgaria, a través del contacto directo con deportistas, pero también a hacer apuestas usando tecnología satelital que les permitía obtener las imágenes de los partidos con algunos segundos de antelación.
"Utilizaban grandes antenas parabólicas en sus casas, donde recibían esas imágenes desde el propio campo deportivo", lo que les permitía ver lo que ocurría con "10 o 12 segundos" de antelación a lo emitido por televisión y así "adelantarse" y hacer las apuestas, detalló Calvete.
La organización hizo apuestas fraudulentas en "más de veinte países", entre ellos Rumanía, Bulgaria, Ucrania, Rusia y Bolivia, dijo de su lado Claudio Marinelli, jefe de la unidad antiblanqueo de Interpol, entidad que colaboró en la investigación, al igual que Europol.
La organización apostó unos 2 millones de euros (2,16 millones de dólares) y obtuvo 4 millones (4,33 millones de dólares) en ganancias, pero una parte de ese dinero fue retenido por las propias casas de apuestas, que activan un mecanismo si detectan jugadas posiblemente fraudulentas, agregó la policía.
I.Barone--IM