Manifestación en París para exigir "justicia" para los tres activistas kurdos asesinados en 2013
Con banderas rojas del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y pancartas violetas con la imagen de las víctimas, los más de 10.000 manifestantes (cifra constatada por la AFP y confirmada por un agente de policía) provenientes de Francia, Bélgica, Alemania, Suiza y Países Bajos se reunieron en París.
"Francia debe hacer justicia a los kurdos porque no es normal: el asesino es conocido, los patrocinadores son conocidos", declaró Berivan Firat, portavoz del Consejo Democrático Kurdo en Francia, una estructura que reúne a una veintena de asociaciones kurdas en el país.
La noche del 9 de enero de 2013, tres activistas del PKK fueron asesinados, en el recinto del Centro de Información del Kurdistán (CIK) en París: Sakine Cansiz, de 54 años, Fidan Dogan, de 28 años, y Leyla Saylemez, de 24 años.
Diez años después, los jueces de instrucción antiterrorista intentan identificar a los posibles cómplices del presunto tirador, que murió en prisión.
Para avanzar en el proceso judicial, "pedimos que se levante el secreto de defensa que impide compartir con la justicia elementos en posesión de la inteligencia francesa", declaró a la AFP Agit Polat, portavoz del Consejo Democrático Kurdo en Francia (CDK-F).
El recuerdo de este asesinato revivió el año pasado tras el asesinato en el centro cultural kurdo de París de tres kurdos (dos hombres y una mujer) el 23 de diciembre por William Malet, ex paracaidista detenido e investigado por asesinatos y tentativas de asesinatos con carácter racista.
V.Agnellini--IM