Emoción y rabia en Reino Unido por ataques mortales de perros 'American bully XL'
Tras una serie de ataques mortales, que han suscitado una viva emoción en el Reino Unido, el gobierno británico está siendo presionado para que tome medidas contra los propietarios y los criadores de perros de la raza 'American bully XL'.
Estos canes de potentes mandíbulas, que pueden superar los sesenta kilos y tienen su origen en el cruce entre razas, se hicieron populares durante la pandemia del Covid-19, una época en la que se dispararon las adopciones de perros.
Pero estas últimas semanas, los ataques provocados por estos animales se han multiplicado, con al menos cinco incidentes, dos de ellos mortales, y alguno con niños de corta edad como víctimas.
"No toleraremos esto mucho más tiempo", había asegurado a mediados de septiembre la ministra de Medioambiente, Therese Coffey, tras la difusión de unas imágenes impresionantes del ataque a Ana Paun, una niña de once años, herida en un brazo y en un hombro en Birmingham (centro de Inglaterra).
Unos días más tarde, dos perros que parecían ser 'American bully XL', atacaron a un hombre cerca de una escuela en la localidad de Stonnall, (centro de Inglaterra), provocando su muerte.
Ante estos hechos, el primer ministro Rishi Sunak prometió medidas contra estos perros.
El gobierno prevé que los propietarios deberán registrarlos y ponerles un bozal en espacios públicos.
También deberá esterilizarlos para hacer desaparecer esta especie en el espacio de una década.
Algunas voces se han alzado para que el gobierno sea más severo y considere una eutanasia general de estos animales.
- "Animales de combate" -
Según Lawrence Newport, investigador de la universidad Royal Holloway de Londres y defensor de la prohibición de estos perros, su agresividad viene de su herencia genética.
"Son perros de combate", declaró, estimando que son responsables del 70% de los ataques en el Reino Unido, cuando solo representan un uno por ciento de los canes del país.
Pero más que centrarse en la raza, Lawrence Newport sugiere interesarse en los criadores poco escrupulosos, que pueden recurrir a otros animales también peligrosos.
En virtud de la ley británica respecto a los perros peligrosos (Dangerous Dogs Act) de 1991, ya es ilegal tener y criar cuatro razas, entre ellas los pitbulls terriers y los tosas japoneses.
El propietario de un 'American bully XL', interrogado por la AFP, que se presentó como Jack, reconoce que pueden parecer "intimidatorios", pero asegura que "ningún perro es violento" si es educado correctamente.
"Estoy muy confiado cuando le veo cerca de mi hija", afirma.
El sitio Bullywatch, que contabiliza los ataques cometidos por estos perros, estima que once muertes han estado relacionadas con ellos desde 2021, a las que se añaden otros tres fallecimientos que podrían también estarlo.
Según este sitio, el aumento de los accidentes mortales que implican a perros de la raza 'bully' "está directamente ligado" a su introducción en el Reino Unido estos últimos años.
"La prohibición de estos perros va a mejorar las cosas, pero si estos criadores tienen el derecho de continuar su actividad, llegarán a crear una nueva raza y nos encontraremos en la misma situación en unos años", lamentó Emma Whitfield, la madre de un niño de 10 años fallecido hace casi dos por un ataque de un 'American bully XL'.
H.Gallo--IM